Los niños vuelven a clases en la Sierra, ya sea de forma virtual o presencial; y una de las preguntas frecuentes entre los padres es ¿Cómo hacer una lonchera saludable? ¿Qué opciones fáciles y rápidas existen sin caer en la comida chatarra? ¿Cómo evitar que su pequeño se aburra con los mismos alimentos de siempre?

Primero que nada, recuerda que la lonchera es tan importante como el desayuno, ya que permitirá que tu pequeño se mantenga con energías para rendir adecuadamente con todas sus labores escolares.

Muchos padres al hacer sus compras se aprovisionan de múltiples snacks, dulces, frutas, bebidas, etc. Pero que tan saludable pueden resultar, si eres de los que se van quedando sin opciones, te invitamos a probar el incluir las frutas en conserva en tu menú.

La fruta nos aporta equilibrio y salud y se puede consumir de múltiples formas. Una de ellas es en conserva, que nos permite comer fruta fuera de temporada en cualquier momento del año y siempre a nuestro alcance. Perfectas para apuros.

La larga vida de estos productos es una de sus principales ventajas, ya que permite tenerlos a la mano para preparar una comida sin necesidad de pasar por el mercado. Por otra parte, los vegetales y frutas en conserva son útiles para asegurar el consumo recomendado de raciones vegetales (al menos 5 raciones diarias), ya que los niños tienden a rechazarlos, y, de nuevo, tenerlos al alcance, puede propiciar un aumento en su consumo.

Por su contenido de azúcar, sobre todo en la opción de frutas en almíbar, su consumo diario no será nunca recomendable, pero si constituye una alternativa mucho más saludable que otros postres.   Y es que, a pesar de todo, la fruta en almíbar también posee beneficios y resultará llamativa para tu pequeño logrando variar su combinación de alimentos sin que esta se salga de control.  Además, que a pesar del almíbar estas siguen siendo frutas que no dejan de ser una fuente de vitaminas y minerales, aunque en menor medida comparado con una fruta natural.

La fruta en almíbar, respecto a la fresca, eleva la cantidad de hidratos, por los azúcares, y, por tanto, aporta más calorías, brindando mayor energía. Pero es desaconsejable para algunas patologías como la diabetes.

En este punto es importante saber que las frutas frescas empiezan a perder los nutrientes al entrar en contacto con el aire mientras que las frutas en conserva retienen su composición de nutrientes por más tiempo. En consecuencia, puede haber casos en los que un pedazo de durazno o piña en almíbar contenga más nutrientes que una pieza de fruta que se consuma bastante tiempo después de haber sido recolectada.

El almíbar es la manera tradicional de conservar frutas, pero no es la única, te ofrecemos la oportunidad de probar la fruta enlatada EN SU PROPIO JUGO, prueba con nuestras piñas trozos o rodajas en su jugo. No tienen azúcares añadidas por lo que al prescindir de esta azúcar son más sanas y conservan mejor sus nutrientes.

Así que recuerda que, en determinadas circunstancias, y de forma moderada, la alternativa de la fruta en almíbar y en su jugo puede ser válida. En especial si sustituyen a otros postres o dulces menos saludables, como los postres o galletas.

 Autora: E.C.Y 

FUENTES DE INFORMACIÓN

• https://cuidateycomesano.com/fruta-en-almibar-un-postre-tradicional/
• https://www.guiainfantil.com/articulos/alimentacion/ninos/alimentos-en-conserva-para-ninos-lo-bueno-y-lo-malo/
• https://www.elespanol.com/ciencia/nutricion/20200330/radiografia-fruta-almibar-conserva-no-sustituye-fresca/477953475_0.html